Resultados del Congreso anual de la European Gliding Union

Resultados del Congreso anual de la European Gliding Union

Durante los días 26 y 27 de febrero se celebro el Congreso Anual de la European Gliding Union (EGU). Este evento se ha realizado en la sede del Real Aero Club de España (que es también socio de la EGU) en el Aeropuerto de Cuatro Vientos en Madrid. En estas dos jornadas se realizaron una serie de reuniones en las que los representantes de los distintos países que integran esta organización han tratado la problemática actual del vuelo sin motor. Aquí están las conclusiones de este encuentro, así como una pequeña entrevista con Patrick Pauwels, presidente de la EGU. Destacar las palabras del presidente en la jornada de clausura, agradeciendo la excelente organización del evento por parte del Real Aero Club de España.

Durante esta reunión de la EGU tuvimos la oportunidad de charlar un momento con el presidente de esta asociación, el belga Patrick Pauwels. Nos comentó que el principal problema que tiene ahora la actividad del vuelo a vela es “la falta de homogeneidad en la normativa deportiva de los diferentes países”. Aunque EASA y las JAR, para la aviación general y comercial, han conseguido igualar un poco las normas, en la aviación deportiva, cada país va por su cuenta. También comentó que es necesario “defender la posición de la actividad respecto a las autoridades nacionales y ayudarlas a comprender la normativa europea”. Por su parte Carlos Gomez Mira, delegado español de la EGU, señaló que España “está a años luz de otros países europeos en cuanto a la actividad del vuelo sin motor”, y con una normativa antigua y diferente al del resto de los países de nuestro entorno.

En cuanto a las reuniones de trabajo, uno de los primeros temas que se trataron fue el apartado del mantenimiento, con una reglamentación muy “burocrática” en aspectos que no mejoran la seguridad y que hace también, que en el caso de España, los propietarios matriculen sus aviones en Alemania, con una reglamentación más racional en este aspecto.

También se habló de la nueva licencia que se quiere incorporar en Europa, la Light Aircraft License, en la que estarían incluidos los pilotos de planeador. Se está trabajando en ella, pero por el momento no está todavía terminada y aprobada. En España actualmente la licencia de planeador está regulada por una Orden del 30 de diciembre de 1985, menos exigente que la futura normativa. Sin embargo, las restricciones para el vuelo de los planeadores en el espacio aéreo español son muchísimo mayores.

En cuanto al entrenamiento, se quiere también hacerlo más homogéneo, con organizaciones para la instrucción, similares a las TRTO de la aviación privada y comercial. Los instructores en España actúan en un ambiente muy desregulado y con un sistema poco homogéneo de instrucción.

También se habló del proceso de incorporación de equipos como el transponder y el FLARM (para evitar colisiones en el aire), ya que en algunos países es obligatorio, mientras que en otros como en el caso de España, todavía no. En otros países también se está empezando a pedir equipos de radio con espaciamiento de frecuencias de 8,33, aunque en nuestro país, y dado que no se habla con centros de control, solo entre veleros o con el aeródromo, no parece por el momento necesario.

Se comentó, además, la necesidad de una mayor cooperación en cuanto a la notificación de incidentes/accidentes, ya que a no ser que haya daños personales graves, muchos de los incidentes no se notifican, con lo que no se tienen unas cifras claras y reales de la seguridad en esta actividad.

Y para terminar se señaló la necesidad de fomentar de alguna manera el vuelo a vela, ya que cada año se reduce el número de pilotos, al tiempo que aumenta la edad media de los mismos, por la escasa incorporación de pilotos jóvenes. A propuesta del Presidente, se decidió crear un grupo de trabajo para buscar soluciones a este problema.