31 Ene ÚLTIMOS CAMBIOS NORMATIVOS: SU ORIGEN ESTÁ EN EL EASA GA ROADMAP DEL 2013
En el último par de años, y en este 2020, se están aprobando una serie de cambios normativos que vienen de la European Aviation Safety Agency (EASA) y que suponen un cambio de ciclo. La normativa puede ir mejorando poco a poco para la aviación general y deportiva.
Tras años de presión normativa sobre la aviación general, que ha hecho mucho daño al sector, el cambio de filosofía por parte de las autoridades aeronáuticas europeas (EASA) supondrá una mejora de la legislación que se aplica a la aviación general y deportiva. Este camino parece que está empezando a simplificar el conjunto de leyes que regulan nuestro sector.
¿Pero cuál es el origen de este cambio de planteamiento por parte de las autoridades europeas?
Esta nueva filosofía tiene su origen en el EASA General Aviation (GA) Roadmap. Este nuevo enfoque se inició en 2013, al darse cuenta los legisladores que la normativa aplicada en la aviación estaba perjudicando notablemente a la aviación general.
Y la verdad es que es una alegría pensar que por fin las autoridades europeas se han dado cuenta del problema, y no hay mejor evidencia que los 6 principios (traducidos literalmente de la página web de EASA) en los que se basa esta nueva filosofía del EASA GA Roadmap:
+ Una talla no sirve para todos.
+ Use reglas cuando sea la única o la mejor manera de alcanzar los objetivos de seguridad.
+ Adoptar un enfoque basado en el riesgo.
+ Proteger «lo que funciona bien» a menos que existan razones de seguridad demostrables y estadísticamente significativas para no hacerlo.
+ Aplicar los principios de regulación inteligente de la UE.
+ Aproveche al máximo los recursos y la experiencia disponibles.
La verdad es que estos principios tienen muy buena pinta, y son el origen de las nuevas normas que se están aprobando. Y ya los podían aplicar AESA, ENAIRE o AENA cuando toman algunas de sus decisiones para la aviación general.
Entre esta nueva legislación podemos destacar la nueva normativa sobre certificación (CS-23), las modificaciones basadas en CS-STAN, las licencias de mecánico B2L y L, las nuevas normas de aeronavegabilidad (Part-M Light y Part-CAO), las nuevas escuelas DTO, o la idea de extraer la parte de licencias para globo o planeador, en normativa independiente, de las FCL generales.
Todas estas normas se aplican únicamente a aeronaves no complejas, básicamente todas las que están dentro de la aviación general y deportiva. Como información, la normativa dice que un avión complejo es el que tiene una masa máxima certificada de despegue superior a 5700 kg, o está certificado para una configuración máxima de asientos de pasajeros de más de diecinueve, o está certificado para operar con una tripulación mínima de al menos dos pilotos, o está equipado con un motor o motores turborreactor o tiene más de un motor turbohélice.
El problema es que estos cambios normativos van muy lentos. Y solo hay que poner el ejemplo de la Part-M Light que se publicó en su fase de “opinión” del sector en 2016, se aprobó por EASA la norma definitiva en marzo de 2019 y entrará en vigor el 24 de marzo de 2020. Sin contar el tiempo de redactar la norma en su versión inicial (que puede ser otro par de años), estamos hablando de 4 años para que finalmente se implemente. Así que paciencia… nuestros “hijos aeronáuticos” seguro que la disfrutarán.